Amoblamiento en casas de ancianos

Quizás no sea una de las principales preocupaciones de familias o asistentes de la salud, pero el tipo de muebles de una casa puede mejorar la calidad de vida de una persona mayor. Sentarse en una silla o acostarse y levantarse de la cama no es tan fácil para las personas de edad avanzada, quienes ya no cuentan con la misma movilidad de su juventud. Los muebles necesitan ser accesibles y, al mismo tiempo, no deben ocupar mucho espacio para que el ambiente quede libre de obstáculos que puedan provocar caídas o lesiones

Escoje sillas con apoyabrazos, lo que facilita que las personas mayores puedan acomodarse en la silla por sus propios medios. Un sillón de dos cuerpos es mejor que un sofá ya que, al ser para dos personas, cada una que se siente dispondrá de un apoyabrazos. Las sillas del comedor y la cocina que cuentan con respaldos altos ayudan a evitar las caídas hacia atrás al momento de pararse.

Opta por los muebles con buen diseño. Evita las sillas, mesas y mesas auxiliares que son demasiado livianas y se mueven con facilidad.

Los apoyabrazos de las sillas deben ser resistentes al desgaste. Los adultos mayores suelen aferrarse a ellos al sentarse o los utilizan a modo de palanca al pararse.



Compra muebles que satisfagan las necesidades de la persona en cuestión. Quienes se trasladan en sillas de ruedas necesitan mesas lo suficientemente altas como para acomodar su silla. Para aquellos que padecen limitaciones visuales, los televisores y monitores de computadora con pantalla grande pueden ser de gran utilidad.

No elijas mesas o percheros con bordes puntiagudos. Las esquinas redondeadas son más seguras. Asimismo, las sillas bajas muy acolchadas pueden parecer cómodas pero, por la inclinación que requieren, dificultan que la persona mayor se siente y se pare. Las sillas deben tener un acolchado cómodo y apoyabrazos que sobrepasen el borde del almohadón del asiento, lo que brinda apoyo para la parte superior del cuerpo de las personas con piernas débiles a causa de la edad.

Aumenta el contraste visual. Los muebles, pisos y paredes de color uniforme aumentan el riesgo de caídas. Las paredes que se diferencian de pisos y tapizados proporcionan indicios visuales, lo que ayuda a las personas con poco alcance visual a distinguir formas y profundidades.

Eleva la altura de la cama si es demasiado baja. Coloca un taburete resistente al lado de la cama si es demasiado alta. Elige un colchón con bordes firmes. Una regla práctica para determinar la altura adecuada es verificar que la persona pueda apoyar los pies en el piso mientras se encuentra sentada al borde de la cama.

Ubica los muebles estratégicamente. Ten en cuenta las zonas de mayor tránsito diario de la casa. Los muebles no deben obstruir el paso. Deja mucho lugar para caminar.

No coloques tapetes para aumentar el contraste, sin importar lo atractivo que se vean. Los tapetes son una causa frecuente de caídas. Las alfombras de pared a pared suelen ser las superficies más seguras para los pisos que transitan personas mayores, especialmente si usan un bastón o caminador.