Para preservar la memoria y salud física: EL TANGO!

¿Es posible que para residentes con problemas de memoria, bailar el vals, foxtrot, o tango sea el camino para mantener o mejorar su función cognitiva? Una comunidad recién abierta en Nueva York tiene como objetivo el probarlo.

Bristal - Lake Success

El Bristal en Lake Success, que ha previsto su inauguración en febrero de 2017 será la primera comunidad de cuidado de la memoria independiente. La empresa promotora ya cuenta con 14 propiedades que ofrecen vivienda asistida y cuidados de la memoria. El Bristal en Lake Success se encuentra junto a la autopista de Long Island, a unos 11 millas al este del aeropuerto de La Guardia.

Programado para tener 88 suites, el Bristal en Lake Success se destacará a través de una colaboración con el Instituto de Investigación Médica Feinstein, hogar de Peter Davis, Ph.D., un prominente investigador de la enfermedad de Alzheimer. Profesor de la Universidad de Hofstra, Davies también es el director del Centro de Investigación Litwin-Zucker para el Estudio de la Enfermedad de Alzheimer en el Instituto Feinstein.

Después de una colaboración inicial en otra comunidad Bristal existente, la compañía amplía su apuesta en Lake Success, adaptando el edificio específicamente para su colaboración con el Instituto Feinstein. Es el primero de su tipo enfocado en facilitar la investigación para las personas con pérdida de memoria en etapa temprana.

El primer programa gestionado conjuntamente por el Bristal y el Instituto Feinstein tuvo lugar en el edificio Bristal para la vida asistida en North Hills, cerca de Lake Success. La respuesta fue "abrumadora", pues la mayoría de los residentes eligió participar, dice Krieger.

El Bristal compró equipo nuevo para los ejercicios que se necesitan para ese protocolo. En el nuevo edificio Lake Success, se está construyendo todo un gimnasio  para el programa de entrenamiento con pesas y ejercicio previstos.


 "Tenemos la esperanza de ver una correlación directa entre el incremento en la resistencia y la mejora del deterioro de la memoria," dice Krieger. Pero este primer protocolo es sólo la punta del iceberg, con el espacio en el edificio dedicado a otro tipo de programación también.

Uno que es particularmente innovador: la enseñanza del Tango a los residentes. "Estamos muy interesados ​​en una oportunidad para que los residentes tengan bailes de salón", dice Krieger. "Tenemos un salón de baile configurado para que esto tenga lugar."

La programación dirigida por Feinstein complementará otras técnicas de cuidado de la memoria incluyendo círculos de lectura, escritura creativa, clases de arte, y clases de música.


Todo esto tiene un precio, por supuesto. Pero el operador podría ver un retorno de esta inversión de capital en forma de aumento de la duración de la estancia, si la programación ayuda a los residentes a mantener su bienestar y salud cognitiva, lo que les impide ir a niveles más altos de atención.