¿A qué edad comienza la Tercera Edad?

Basado en un análisis de Francisco Jueguen
(Diario La Nación - Argentina)

Los drasticos cambios en la duracion de la vida promedio siguen modificando los paradigmas conque la sociedad se mueve, a veces con mas rapidez de lo que el comun de la poblacion esta dispuesto a reconocer.

El periodo de vida util, y el plazo aceptable para vivir jubilado se modifica. La prolongacion del periodo juvenil y del ciclo de estudios esta posponiendo el inicio de la actividad laboral. Y la mayor salud en la población posibilita que se conserven activos por mas tiempo. Bajo estas condiciones, la edad de jubilación es una de las primeras variables que deberán ajustarse.

En 1936 el periodo promedio de vida era de 65 años. Era aceptable entonces pensar en 55 para jubilarse. Pero ahora que el promedio ha crecido casi 15 años mas, esa edad jubilatoria es inviable pues ningún sistema soportaria jubilados que aporten durante 35 y cobren por un periodo similar. Aunque resulte desagradable pensar en prolongar la vida útil (a todos nos agrada imaginarnos jubilados por largo tiempo y en excelente salud), no es posible violar las inexorables leyes biológicas y sus consecuencias económicas sin pagar un costo mas alto.


El aumento de la edad de jubilación es la bandera de los políticos en Europa para enfrentar la crisis. Luego de los millonarios salvatajes bancarios financiados con fondos de los contribuyentes, esta opción se convirtió en una de las formas con las que los líderes políticos buscan reducir sus déficit. Si bien estos cambios eran ya una cuestión encaminada, debido fundamentalmente a la mayor esperanza de vida y a un crecimiento vegetativo de la población con tasa decreciente o negativa, la crisis financiera aceleró los planes.

Más allá de las diferencias en las formas (algunos tienen un sistema de reparto estatal, mientras que otros detentan uno mixto sumando la capitalización privada), las preguntas son las mismas: Cómo mantener la seguridad social en un marco de envejecimiento de la sociedad y de crisis económica.

Las duras jornadas de huelga que enfrentó Francia la semana pasada tuvieron que ver directamente con los proyectos de modificar la edad mínima de jubilación, de los 60 a los 62 años. Además, el aumento de la edad mínima de la jubilación -que se aplicaría progresivamente desde 2011 a 2018- supone incrementar de 65 a 67 años la edad necesaria para que no haya ninguna penalización en la pensión por retirarse prematuramente. En tanto, el período de años aportados requerido para cobrar una jubilación completa crecerá hasta 41 años y medio.

Fuera del continente, el nuevo gobierno de coalición británico pretende adelantar los planes sobre la edad de jubilación a 2016, en vez de 2024 como quería la anterior administración laborista, según un informe de Reuters. El objetivo es que la edad pase de los actuales 65 años a los 66 a partir de 2016, algo que deberá ser aprobado por el Parlamento. No obstante, se especula que la edad para el retiro podría llegar a los 70 años.

En España, donde el gobierno socialista vive una crisis que mantiene a más del 20% de la población desempleada, la edad de jubilación está fijada en los 65 años. La administración de José Luis Rodríguez Zapatero pretende -reforma mediante- retrasar la edad del retiro. Un anuncio realizado a comienzos de este año por el gobierno sobre el eventual aumento de 65 a 67 años de la edad de jubilación entre 2013 y 2025 causó el rechazo de los sindicatos y manifestaciones de trabajadores.

La Italia de Silvio Berlusconi no es la excepción. En la península los hombres se jubilan a los 65 años mientras que las mujeres a los 60 (en ambos casos con 35 años de aportes). El plan de ajuste presupuestario del gobierno de derecha plantea que desde el 1° de enero de 2012 las mujeres que trabajen en la administración pública deberán jubilarse a los 65 años o después de 40 años de aportes.
El gobierno había previsto llegar a la equiparación entre hombres y mujeres en 2018, pero el Tribunal de Justicia europeo le exigió, ante la fenomenal crisis que arrasa a Europa, que lo hiciera antes de 2012.

"Existe un drama de las jubilaciones futuras en la totalidad de las economías avanzadas", explicó Palma Cané. "Este problema estructural deviene de varios factores: mayor esperanza de vida, un crecimiento vegetativo de la población con tasa decreciente o negativo [con lo cual cada vez se necesitarán más trabajadores por jubilado] y atrasos generalizados en los valores jubilatorios", indicó.

"Esto no se soluciona congelando en forma temporaria el valor de las jubilaciones sino haciendo una reforma estructural de mediano plazo que contemple, entre otras medidas: mayor edad para jubilarse, mayores aportes de las empresas en función de sus ganancias y fuertes aumentos de la productividad, lo cual incrementaría los ingresos reales de los consumidores y las ganancias corporativas y, por ende, el flujo marginal hacia la tercera edad", comentó el economista.

Antes de que explotara la crisis, Alemania, el ejemplo del Viejo Continente, aprobó en 2006 una reforma del sistema de pensiones cuyo elemento clave es un aumento paulatino de la edad de jubilación, que en ese momento estaba en 65 años, a los 67 años. La edad de retiro empezará a aumentarse en 2012 y jubilarse antes de los 67 años seguirá siendo posible pero implicará aceptar una rebaja en el monto de la pensión.

En tanto, en Dinamarca dieron luz verde en 2006 a una reforma que elevará la edad de jubilación de 65 a 67 años entre 2024 y 2027 y la de la jubilación anticipada de 60 a 62 años entre 2019 y 2022. A partir de 2025 las autoridades danesas indexarán la edad de jubilación en función de la esperanza media de vida.

Desde el año que viene, Noruega implementará un sistema de jubilación flexible, que entrará en vigor progresivamente a partir de 2011, y que permite jubilarse desde los 62 y hasta los 67 años, incentivando a quienes pospongan la edad de retiro. La nueva normativa fue aprobada el año pasado en medio del cimbronazo financiero.

En tanto, Suecia, tiene un sistema similar al noruego, que hace posible una jubilación flexible desde los 61 años e introduce también una serie de incentivos, de forma que la pensión anual puede aumentar hasta un 60 por ciento para quienes retrasen su jubilación hasta la edad límite de 67 años. En Bélgica, la edad de jubilación legal es de 65 años, aunque también es posible desde los 60 con la condición de tener 35 años de trabajo profesional.

Las jubilaciones en relación al sueldo
En España y Austria están apenas por debajo del 80%, mientras que en Suecia están levemente por arriba del 60% y en Suiza, casi por debajo de ese nivel. En Italia se roza el 70%, mientras que Francia se supera levemente el 50%. En tanto, Alemania y Canadá apenas traspasan el 40%. Actualmente en Argentina se paga aproximadamente un 35% del salario medio como jubilación. Los hombres pueden jubilarse a los 65 años, mientras las mujeres lo hacen a los 60 (aunque pueden optar por trabajar hasta los 65).